El estudio psico-energético se realiza a partir de la fecha de nacimiento de la persona y permite determinar qué partes del cuerpo tienen mayores desequilibrios energéticos impidiendo que la energía fluya correctamente, tanto por falta de energía como por exceso.

Este estudio está directamente ligado a la programación subconsciente que nos inculcaron nuestro padre y nuestra madre durante los 7 primeros años de nuestra vida, y nos permite ver cómo ‘los vivimos’ desde nuestra psique de niños. Esta vivencia de los modelos materno y paterno nos dejó por un lado un rastro energético concreto y tangible en nuestro cuerpo, y por otro influyó de manera significativa en nuestra capacidad de actuar/dar, de pedir/recibir, de afrontar nuestro futuro y de gestionar nuestro pasado.

Durante esta sesión determinaremos las áreas más afectadas a nivel energético durante nuestra niñez, y veremos de qué manera podemos llenarlas de energía; cómo cada área está asociada a un número o frecuencia vibratoria, podremos llenarla de energía desarrollando acciones concretas en nuestra día a día que estén en sintonía con esta vibración numérica.

Además,  a través de técnicas de testeo kinesiológico verificaremos si los desequilibrios energéticos de la persona están provocando algún tipo de somatización física, emocional o mental. En caso de detectar somatizaciones, aportaremos información sobre su causa profunda preguntando kinesiológicamente a los diferentes cuerpos de la persona (cuerpo físico, emocional, mental, sutil, etc.), y podremos aplicar técnicas de sanación kinesiológicas si el ‘biocampo / inconsciente’ de la persona nos lo pide.